Lisboa es una ciudad y sus habitantes tienen una forma de vida agitada y estresante, similar a la de Londres o Berlín. Pero aun así, son muy capaces de prerarar sorpresas sólo para que uno se sienta cómodo en esta mágica ciudad.
Los Lisboetas aman las fiestas, eventos, la vida nocturna y cultural y en general son gente muy relajada.
Nunca hubo una manera ideal para describir a un pueblo y de Lisboa no es una excepción.
En las calles de la ciudad hay un poco de todo:
– Barinas gritando el precio de sus peces
– los artistas muestran sus pinturas o sus dotes musicales
– hombres de negocios caminar rápidamente al trabajo
– los vendedores de castañas asadas
Pues bien, es precisamente esta mezcla que es el encanto de Lisboa, una ciudad vibrante, con gente dinámica y una forma de vida igual de vibrante…